Esta historia ustedes tal vez la han leído antes, pero es muy edificante la cual me llegó mucho mi espíritu de esperanza, espero que el de ustedes también cuando la repasen.
Un joven que trabajaba en el ejercito era humillado constantemente por ser cristiano.
Un joven que trabajaba en el ejercito era humillado constantemente por ser cristiano.
Un día su superior queriendo humillarlo delante de la tropa o el pelotón llamo al soldado y le dijo:
Joven venga aquí, tome la llave y vaya aquel jeep y estaciónelo allá al frente.
El joven soldado dijo: no se manejar…
Entonces dijo el superior, pero vamos pida ayuda a su Dios, muéstrenos que el existe.
El
soldado agarro la llave y mientras iba al vehículo empezó a orar, subió
encendió la movilidad y manejó estacionándolo perfectamente. Al salir del jeep, el soldado vio a todos aquellos que estaban llorando y diciendo: nosotros queremos servir a tu Dios.
A
veces le damos más importancia a los problemas y no confiamos en Dios,
que el todo lo tiene bajo su control, donde en su diccionario y léxico
la palabra imposible no existe.
Jesús le dijo a María hermana de Lázaro: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? (Juan 11:35)